Finalizada la sentencia por las violaciones a los Derechos Humanos cometidas en La Perla, uno de los centros clandestinos de detención más grandes del país, se dictó prisión perpetua para el genocida Luciano Benjamín Menéndez. Horas antes, Marité Sánchez, abogada de Abuelas de Plaza de Mayo Córdoba y querellante en el juicio, comentó sobre la causa y sus expectativas del fallo en una entrevista con el programa radial La Revancha (FM La Tribu). Por Ana Schimelman, para La Revancha.
-¿Qué fue La Perla y qué importancia tuvo para la represión en la provincia de Córdoba?
-Antes que nada, quiero aclarar que también se juzgan hechos cometidos en la D2 y en la Rivera, pero la Perla fue uno de los centros clandestinos de detención y exterminio más grandes, por donde pasaron muchísimas personas. Ahora es un sitio de memoria pero durante la última dictadura militar fue un lugar donde se torturó y murieron compañeros, donde se trató de todas las formas y métodos posibles de destruir a las personas que fueron secuestradas allí.
-Teniendo en cuenta todo este recorrido de cuatro años que llevó a la sentencia, ¿qué expectativa tienen sobre el veredicto de los jueces?
-Las expectativas que tenemos es que los jueces fallen de acuerdo a todo lo que hemos probado, pruebas que han aclarado absolutamente cómo fueron los secuestros, hasta el paso por La Perla o por los otros centros clandestinos. No son solo pruebas testimoniales, sino también documentales, por lo que esperamos que el fallo nos dé la razón. Hemos puesto en este trabajo mucho empeño: hemos buscado concienzudamente y analizado cada prueba, así que estamos tranquilos con el sentido de deber cumplido.
-En el contexto donde el gobierno pone en duda la cantidad de desaparecidos y hace gestos hacia las FFAA, donde algunos medios recuperan la teoría de los dos demonios y la Justicia está concediendo domiciliaria a algunos genocidas, ¿qué importancia creés que tiene este fallo?
-Particularmente creo que este va a ser un fallo histórico, confío en la sapiencia del tribunal oral. Creo que a lo largo de la historia conocimos indultos, conocimos pasos atrás en la lucha por los Derechos Humanos y la reivindicación de la condición humana. Pero en última instancia creo que todo lo que se ha hecho en materia de DD.HH y que ha tenido el reconocimiento internacional de nuestro país está hecho, y en eso no hay vuelta atrás. Podremos tener gobiernos como el actual, que vuelva a hablar con el mismo léxico de los militares, de guerra sucia, pero creo que está absolutamente probado desde la sentencia a la junta militar en adelante que esto fue un genocidio. Ese es el nombre que debe darse a la masacre que vivió nuestro país, es la categoría en la que debe encuadrarse los delitos cometidos, porque el objetivo fundamental fue el exterminio de un grupo nacional que ellos consideraban opositor a los golpistas, y al proyecto que querían instalar e instalaron en el país.
-La causa además de tratar los temas en Córdoba en la última dictadura militar también incluye las violaciones a los DD.HH en el período previo a 1976. ¿Qué se pudo probar en el juicio con respecto a ese período?
-El plan de exterminio, lo que se llama plan sistemático, fue concebido con anterioridad al Golpe de Estado de 1976. En mis alegatos me réferi justamente a esta etapa: a partir del ‘74 en Córdoba un jefe de policía había dado un Golpe al gobernador elegido democráticamente, y se instaló una metodología de persecución también de exterminio de personas. Tal fue el caso de los hermanos Chabrol que fueron secuestraron el 18 de Octubre de 1975 y fueron llevados a la D2, uno de los principales lugares que funcionaron antes del Golpe y siguieron funcionando después. Es decir que si bien luego del 24 de marzo las violaciones a los Derechos Humanos se masificaron, hubo muchísimas victimas anteriores.
Audio completo: http://www.larevanchaprograma.com.ar/esta-absolutamente-probado-que-fue-un-genocidio/