Desde la prensa comercial, se señaló que la multinacional está en trámite para vender el predio en la localidad cordobesa. Por Lea Ross para Ecos Córdoba. Foto de archivo ECOS Córdoba.
Lunes a la mañana. Empleados de la empresa Astori se presentaron en el predio de Monsanto, en Malvinas Argentinas. Según comentan los que participan del bloqueo, los trabajadores se presentaron para realizar una inspección en el terreno, ya que la multinacional estadounidense tenía intenciones de vender el terreno.
Miércoles a la mañana. La sección de economía i-Profesional, perteneciente a InfoBae, publicó el siguiente titular: “Monsanto desarma un proyecto de $1.500 millones en Córdoba”. La nota lleva la firma de Patricio Eleisegui, quien a su vez es el autor de Envenenados, un libro sobre agroquímicos y su impacto en la salud.
La información fue brindada por uno de los ejecutivos de la empresa Monsanto. Por el momento, no se puede brindar su nombre.
Supuestamente, la multinacional vendría teniendo su postura de deshacerse de la fábrica sin terminar, en la localidad cordobesa, por el panorama coyuntural desalentador del negocio del maíz, basado en el freno de la expansión de los cultivos del mismo.
“La pauta de procesamiento de la planta estaba en el orden de los 3,5 millones de hectáreas de maíz y en los últimos años apenas se pasó de los 2,5 millones”, señaló la fuente al periodista de InfoBae, quien además apuntó que “con las instalaciones que hoy Monsanto posee en Rojas, en la provincia de Buenos Aires, la compañía puede operar con tranquilidad”.
Precisamente, los que están en el bloqueo habían señalado que los empleados de Astori aseveraron que los elementos que están adentro del predio se trasladarían a la fábrica que tiene Monsanto en Rojas.
Hasta el momento, la empresa no ha dado ninguna declaración y ya hay algunos que lo estarían negando. Tampoco ha habido declaración alguna desde el estado provincial, ni del municipio de Malvinas Argentinas. Tampoco se sabe qué empresas o entidades estarían interesadas en adquirir las tierras que están al costado de la ruta provincial A-88.
La cautela y la paciencia serán dos elementos en tiempo presente a la hora de obtener la tan apreciada confirmación oficial. Llevando cuatro años en conflicto, cuyo saldo generó una voltereta dentro de los estamentos del poder cordobés, impensado para Monsanto. Un saldo que convirtió a una pequeña ciudad en uno de los epicentros mundiales en disputa contra el modelo del agro-negocio, con una docena de funcionarios públicos recientemente imputados.
El final de la espera será un nuevo comienzo.
