A casi un mes de la conciliación obligatoria, la empresa EITAR S.A. de Bernal Oeste, confirmó la desvinculación de más de 70 operarios y elevó una medida cautelar sobre uno de sus delegados. Ante esto, los trabajadores decidieron, en asamblea, tomar la fábrica. Entrevista para El Caminante con Hernán Sosa, uno de los delegados de EITAR.
No son días tranquilos para los trabajadores. El caso de EITAR lo reafirma. Esta fábrica de válvulas cuenta con un plantel de alrededor de 320 personas, donde se incluyen los jornales y los mensualizados. La mayoría están nucleados en el gremio de la UOM.
Recientemente, la empresa comunicó mediante las redes sociales, que, debido al cierre del procedimiento preventivo de crisis, el ministerio avaló la decisión de realizar el despido de más de 70 trabajadores, a quienes la empresa propone pagar un 50% de indemnización en 24 cuotas. Además, los empleados cobran fuera de término desde hace meses, con suspensiones incluidas, y se realizó una medida cautelar contra uno de sus delegados.
En dialogo con El Caminante, Hernán Sosa, delegado de EITAR desde 2009 que trabaja en la empresa desde hace 12 años dio más precisiones sobre lo que viene ocurriendo en la planta. "Ellos dicen que para mantenerse en el mercado de hoy, por un tema de importaciones y competitividad a nivel internacional necesitan una reestructuración de 100 personas", señala. "Nosotros hemos creado propuestas, pensamos en suspensiones rotativas, hablar en el ministerio. Acá todos queremos mantener el trabajo, y los compañeros más allá de creer o no creer que la empresa tiene o no tiene plata, priorizamos asegurar esa fuente de trabajo", afirma Sosa.
"No creemos que sea real la crisis que la empresa dice tener, ya que se trata de una empresa de 60 años que viene marcando tendencia en lo que es línea blanca y venimos del año pasado, de haber sido líderes en el mercado", marca Sosa con firmeza. "Manejábamos el mercado interno, hemos terminado el último semestre del año pasado con un premio de producción", según cuenta.
La situación limite que afrontan no se condice con el nivel que la fabrica muestra en su producción. "Las compañeras y compañeros que están trabajando en esas líneas (de producción de válvulas) han llegado inclusive a producir 2500 válvulas. O sea, la producción se mantuvo más allá de lo que están planteando", narra Sosa. "Desde que empezamos a fines de enero, principios de febrero, después de venir de las vacaciones que también fueron mal pagas, nos encontramos con esta supuesta realidad de que ellos ni siquiera tienen plata para pagar las indemnizaciones correspondientes, como dice el artículo 45 de la ley de Trabajo", plantea el delegado.
Además de las suspensiones y despidos injustificados, la empresa ha sacado la semana pasada una medida cautelar contra otro delegado, Matías Fernández. "Nos parece medio ilógico que una cautelar salga tan rápido para un compañero delegado y cuando uno prende la tele ve que hay una persona que le prende fuego a una señora y sigue libre, y le sale una cautelar a los tres, o cuatro años a veces. En nuestro caso, en una semana le salió una cautelar a un compañero, argumentando solamente que le creen a tres testigos", explica el trabajador. Además denuncia: "le meten la cautelar a un compañero delegado porque lucha por los trabajadores".
Todavía los trabajadores no definieron los pasos a seguir. "En principio estamos en una toma de fábrica, mediante la asamblea se van a ir decidiendo los pasos a seguir, y también están hoy los delegados reunidos en el Congreso. No puedo decir cuál es la medida ya concreta que tomaremos de acá en adelante porque hoy lo que tenemos por nuestra asamblea es la toma de fábrica que estamos llevando adelante. Los pasos a seguir se van a ir viendo también en relación al acercamiento que haya desde la empresa. La solución la tienen ellos", finaliza Sosa.