Ayer lunes, en los tribunales de Quilmes se desarrolló la tercer instancia del juicio por la muerte de David Vivas y Javier Alarcón en la cual las partes expusieron sus alegatos frente a las juezas.
Recordamos que el hecho ocurrió el 3 de marzo de 2013, cuando un grupo de jóvenes que volvían de bailar se cruzaron con el ex policía Alfredo Veysandaz, quién les disparó, causando la muerte de dos de los jóvenes y dejando gravemente herido a un tercero, dandose a la fuga luego.
Las juezas que siguen el caso, Silvia Etchemendi, Florencia Butiérrez y Marcela Vissio escucharon los alegatos, en primer lugar, del fiscal Fernando Celesia. El personal fiscal alegó que considera que el ex capitán Alfredo Veysandaz es culpable de los hechos que se lo acusan y que en lo que a su defensa respecta, no pudo probar nada de lo expuesto. Solicitó la pena de 23 años de prisión por homicidio y lesiones graves, considerando la muerte de David y Javier, y las lesiones producidas por un balazo a Marcelo Lúquez.
En segundo lugar, alegó la abogada querellante María del Carmen Verdú. La abogada reforzó todas las ideas que el fiscal había expuesto, en las que se refería a las pruebas que demuestran que Veysandaz tuvo intención de matar a los jóvenes y que luego tuvo intención de ocultar los hechos.
“El señor Veysandaz dijo que ese día cuando se bajó del auto ‘se acabaron los protocolos’ a eso en el barrio le decimos gatillo fácil” expresó la abogada Verdú en sus alegatos. Agregó que el hecho de ser un policía no debe ser considerado un agravante sino que, su condición de policía fue elemental para que los jóvenes murieran. “Y cuando el que mata es el brazo armado del estado, el dolor es doble. Y se habrán dado cuenta cuando escucharon a Gladys y a Bety, sus madres” dijo Verdú y solicitó la condena a cadena perpetua para el ex capitán de la comisaría primera Alfredo Veysandaz por triple homicidio, dos consumados y uno en grado de tentativa.
Por último, fue el turno del abogado defensor de Veysandaz, quien pidió la nulidad de todo lo llevado a cabo y el sobreseimiento de su patrocinado alegando que el fiscal de la causa actuó con “falta de objetividad” y que "hubo múltiples contradicciones en todos los testigos”. Además el abogado volvió a insistir en las declaraciones de su defendido en las cuales se refiere a un “estado de obnubilación” que no le permitieron actuar con claridad durante y después de los hechos.
Las organizaciones en Tribunales
Este lunes, al igual que en las dos instancias anteriores del juicio, distintas organizaciones sociales acompañaron a los familiares y amigos de David y Javier en la puerta de los Tribunales. Terminado el juicio expresaron que esperan que se haga justicia. “Veysandaz no pudo explicar por qué se fugó, por qué no regresó a su destacamento, a pocas cuadras de distancia, ni por qué no llamó al 911 ni pidió una ambulancia desde su celular. Mucho menos pudo explicar por qué estuvo prófugo en su casa en San Martín hasta que se lo detuvo” dijeron.
El próximo lunes 29 de febrero a la una de la tarde, las juezas dictaran la sentencia.